Querida MARÍA ELENA:
Las circunstancias de la vida, hicieron que esta mañana 10 de enero de 2011, estuviese sentada en la habitación contigua a la tuya, en la misma clínica.
La tristeza, el dolor y los compungidos rostros de tus seres queridos, atestiguaban tu reciente muerte después de un largo sufrimiento, ese momento, no pudo más que estremecer mi corazón y hacer brotar lágrimas de emoción...
Tantos recuerdos brotaron de mi mente...tantas canciones, tanta poesía, tantos cuentos, tantas palabras y tanta música...escuchada cuando niña, leída y releída en mi adolescencia, contada y cantada durante años como maestra...
Tus canciones y poemas, MARÍA ELENA, pusieron música a la infancia de millones de argentinitos que disfrutan de la creatividad, los juegos de palabras, las historias y los disparates que nacieron en tu imaginación.
Y nosotros, LOS GRANDES, también hemos tenido la oportunidad de disfrutarlas con nuestros hijos, nuestros alumnos y entre nosotros mismos, al escuchar esas maravillosas canciones que han mostrado tu compromiso constante y consecuente entre tu arte y tu modo de ver y pensar el país , reafirmando nuestra identidad y los modos de ser de los argentinos.
Gracias María Elena.
Lic Elena Liniado
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Se fue una grande, una de esas personas que te hacen pensar , que te duele su partida. Mis hijos escucharon la noticia y se pusieron tristes, me miraron y me dijeron "mami, se murio Maria Elena", con carita de no puede ser. El mas chico adopto como canto de cuna Manuelita , y la cantaba, entonces ellos empezaron a nombrarme las canciones de Maria Elena, como haciendo un pequeño homenaje. Se fue una grande, que tristeza. Gracias Elena por tan lindo texto.Adriana K.
ResponderEliminarTenés razón Elena. No hace más de un par de días atrás, miraba con mi hijo Lucas (de 19 años) un viejo video de cuando vivíamos en Berlin. Lucas cantando durante el desayuno antes de ir al jardín. Y sonaba más o menos así: Manoenita...Manoenita...Manoenita donde vas?
ResponderEliminarPuf! Qué bajón!
Hecki